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Este artículo es una traducción de la entrevista original
La crisis energética que se ha producido en Europa a raíz de la invasión rusa de Ucrania ha vuelto a evidenciar nuestra dependencia de una fuente de energía controlada por unos pocos países en el mundo. Europa se dirige ahora hacia un invierno incierto; aunque las temperaturas han sido suaves por el momento, tarde o temprano bajarán y muchos lo tendrán difícil para calentar sus hogares.
El sabotaje de los gasoductos Nord Stream en el mar Báltico a fines de septiembre ha dado a la situación un giro al estilo James Bond con el que nadie contaba este año. Ahora está claro que incluso un cambio hipotético en las relaciones políticas con Rusia no restablecerá el suministro de gas a tiempo para hacer frente a las bajas temperaturas o para reponer los depósitos de reserva antes del próximo invierno.
Nos hemos embarcado en un road trip con Timothy Whelan (Carlow, Irlanda, 1978), un ingeniero mecánico submarino que trabaja en la extracción de petróleo y gas en aguas profundas, para averiguar cómo ve el panorama un experto en la materia.
SciGlam: ¿Qué te llevó a convertirte en ingeniero mecánico submarino?
Timothy Whelan: Realmente, no tenía una predilección especial por este tipo de trabajo, solo necesitaba un trabajo. Estudié ingeniería mecánica en la universidad y cuando terminé intenté conseguir un montón de trabajos distintos. Hice muchas entrevistas y finalmente conseguí dos ofertas. Elegí petróleo y gas porque me dijeron que viajaría bastante con el trabajo. No había viajado mucho hasta entonces, así que me pareció más interesante.
¿Y has viajado mucho?
Pues sí, he viajado constantemente durante diez años. Pasé dos años en París, casi dos años en Nigeria, dos años en Italia, casi un año en Chipre, y luego he hecho muchos viajes pequeños a muchos lugares diferentes.
¿En qué consiste exactamente tu trabajo?
Mi trabajo ha cambiado mucho. Cuando empecé en 2007, trabajaba principalmente en desarrollo de campos petroleros en aguas profundas. Diseñaba raisers que son básicamente tuberías flexibles que van desde el fondo del mar hasta lo que quiera que haya en la superficie.
Esto cambió sobre el 2012 ó 2013, cuando se produjo una gran caída del precio del petróleo. El precio era tan bajo que costaba más extraer un litro de petróleo que lo que se ganaba por venderlo, por lo que la industria dejó de invertir en nuevas exploraciones. En aquel momento estábamos desarrollando grandes proyectos, y comenzamos a hacer proyectos más pequeños como la importación de petróleo en los puertos. Piensa en un petrolero que llega a un puerto, el proceso de llevar el petróleo a la costa… Desarrollamos este tipo de infraestructuras.
Y ahora ha vuelto a cambiar. Todavía sigo haciendo eso un poco—principalmente gas, no tanto petróleo. Pero estamos mucho más involucrados en las plantas de desalinización de agua—creando tuberías flexibles para la toma de agua—que también son perjudiciales para el medio ambiente. Tomas agua de mar y el 60% de esa agua se convierte en agua dulce, pero el 40% restante regresa como agua salada concentrada.
Lo del agua lo hago principalmente para las fábricas de plástico (consumen una cantidad importante de agua). El otro proyecto en el que estamos involucrados es la producción de hidrógeno como fuente de combustible. Es un punto fuerte en este momento, hay muchas empresas involucradas. Lo llaman hidrógeno verde y tratan de venderlo como combustible limpio porque no emite carbono cuando lo quemas, pero usan agua desalinizada para hacerlo.
El hidrógeno se crea a partir de agua desalinizada usando electricidad que procede de energía eólica, de grandes turbinas. Básicamente, haces pasar una corriente eléctrica a través del agua para convertirla en hidrógeno/oxígeno y te quedas con hidrógeno. Pero no creo que se vaya a utilizar nunca como combustible. Es solo una opinión personal, pero creo que el hidrógeno es peligroso. Explota mucho más fácilmente que el petróleo.
Parece que el sector industrial está invirtiendo cada vez más en energías renovables. ¿Podemos ser optimistas al respecto?
Sí, las grandes compañías petroleras están virando hacia a energías más ecológicas, pero ¿realmente lo son? Quieren tener buena prensa ante la opinión pública: hay mucha presión para alejarse del petróleo.
El gas es algo diferente, pero el petróleo se considera ‘trabajo sucio’ en este momento. Ya no se ven grandes desarrollos petrolíferos como solía haber, no solo por el precio sino por la percepción del público. Tiene mala reputación. Por ejemplo, algunos de mis compañeros de la empresa están trabajando en el diseño de cables para turbinas eólicas marinas flotantes—tiene mecanismos similares a las tuberías flexibles que desarrollamos para las plantas de desalinización. Pero todo eso sigue suponiendo grandes construcciones industriales, así que, ¿es ecológico? Por su naturaleza, diría que no lo es; es mejor que extraer petróleo, pero aun así no es ecológico.
Y en términos de propiedad, todo pertenece a un pequeño número de empresas. Las compañías petroleras son propietarias de la mayoría de las empresas eólicas. Ellos controlan completamente el negocio de la energía. No tenemos elección de dónde viene nuestra electricidad. Viene de donde viene. Simplemente enchufamos la televisión y listo.
La realidad es que se sigue utilizando petróleo; Lo encontramos en el plástico (más del 90% de los plásticos contienen petróleo), en la fibra de carbono, en resinas, el maquillaje, el champú… El petróleo se usa en todas partes; la gente piensa en los coches, pero yo pienso en el plástico y los cosméticos.
El petróleo se usa en todas partes; la gente piensa en los coches, yo pienso en el plástico y los cosméticos.
Siempre hemos oído que el petróleo es un recurso limitado y que en algún momento se acabará. ¿Es cierto?
Existe la creencia general de que el petróleo se va a acabar, pero puede que no. Leí un libro sobre la teoría del pico del petróleo (peak oil) del geólogo M. King Hubbert, que en 1956 predijo que la extracción máxima del petróleo ocurriría en los años 90. Pero no era correcto; se descubren nuevas reservas de petróleo todo el tiempo, especialmente ahora que tenemos la capacidad de profundizar más y más en el océano. Cuando comencé a trabajar en esto, los pozos más profundos estaban en torno a los 3000 metros, ahora están llegando a 4000 metros. La tecnología para extraer petróleo y gas también ha avanzado, así que honestamente creo que nos cargaremos la atmósfera mucho antes de quedarnos sin petróleo o gas.
En cualquier caso, la atención ahora se ha centrado más en el gas: es más fácil de obtener que el petróleo. Viene en paquetes más pequeños. Puedes perforar 20 pozos de gas y cada uno de estos pozos dura un año. Se trata de pequeñas instalaciones; el petróleo implica proyectos más grandes, en aguas más profundas, y además requiere de perforaciones más profundas para llegar a él. Pero nunca se detuvo su extracción, no creo que llegue el día en el que nos quedemos sin petróleo.
En lo que se refiere a la actual crisis energética en Europa, ¿cuáles son las opciones a corto plazo?
Es un problema difícil de resolver para Europa porque tienen que traer el gas de fuera. Especialmente para Alemania, donde usan el gas no solo para generar energía sino también para calentar los hogares; no sé qué van a hacer, la verdad. Mucha gente va a pasar frío.
En realidad, hay suficiente gas en el mundo para compensar la pérdida del Nord Stream, el problema es que no hay ninguna infraestructura preparada para importarlo, no tienen gasoductos por tierra (hay un plan para una tubería de gas que llegue a Turquía, pero aún no se ha construido). Por ahora, la única opción para el suministro de gas es desde el mar a través de barcos, pero tienen que construir las instalaciones específicas en los puertos para llevarlo a tierra.
Francia está haciendo una instalación de emergencia en este momento; algunos de mis colegas están trabajando en esto. Es un proceso bastante sencillo, traen GNL (gas natural licuado) en barcos, pero tienen que construir las terminales para descargar el gas. No lleva más de un par años, incluido el diseño y el proceso de construcción, pero será increíblemente costoso para todos. Obviamente, es más caro transportar gas en barcos que por gasoductos, porque un gasoducto siempre está ahí, una vez que lo construyes ya está. Pero en barcos… primero tienes que construirlos, luego tienen que cruzar el océano, lo que puede tardar varias semanas; y, finalmente, como el gas entra en estado líquido, hay que volver a convertirlo en gas, por lo que hay que construir una terminal llamada FSRU (unidad flotante de almacenamiento y regasificación), que es otro tipo de barco.
Hay planeado construir una terminal en Irlanda. Grecia también ha estado construyendo una terminal recientemente. La construcción de estas terminales ha ganado popularidad en todo el mundo, desde hace unos 5 ó 6 años, antes de esta crisis, pero la de Francia, en Bretaña, es una respuesta directa a los acontecimientos actuales. Concretamente, construir una terminal de importación de gas y una central eléctrica en el mismo lugar es una práctica muy popular. Son muy rápidas de construir y el argumento es que el gas es menos dañino para el medio ambiente que quemar petróleo o diésel.
Nuestro futuro está ligado a la producción de energía. No podemos sobrevivir sin electricidad porque todo funciona con electricidad, incluso nuestro dinero.
Pero en términos de esta crisis, no hay una opción a corto plazo; vamos a tener un invierno muy difícil. Seguramente tendré menos dinero, sé que mi factura de la luz va a ser una locura.
Norway, Canada, and the US are willing to support Europe in this energy crisis. Is this feasible?
Canadá y Noruega producen mucho gas, pero hay un problema de distribución. Todo lo que pueden hacer para ayudar es controlar los precios del combustible. Definitivamente vamos a tener un problema a corto plazo.
Nuestro futuro está ligado a la producción de energía. No podemos sobrevivir sin electricidad porque todo funciona con electricidad, incluso nuestro dinero. De modo que, si podemos encontrar una manera de producir electricidad que no implique generar dióxido de carbono o colapsar todo el planeta, podemos solucionar el problema.
Personalmente, creo que la solución es una combinación de energía solar y nuclear, tan limpia como sea posible. Es menos arriesgado si tienes un país política y geológicamente estable. Pero mi opción favorita es la energía solar; en última instancia es de donde proviene toda la energía. Aunque la energía solar también tiene sus inconvenientes: los materiales de los que están hechas las células fotovoltaicas se extraen mediante minería… Esto es aplicable a todas las energías renovables; todas utilizan minerales raros que hay que sacar del suelo, con todas las consecuencias que ese proceso tiene para el medio ambiente. Puedo sonar muy pesimista, pero, con el nivel de población que tenemos, no encontraremos una solución que no envenene al planeta.
¿Qué te parece la energía hidroeléctrica?
La hidro es genial, pero está restringida a ubicaciones específicas, y hay que construir grandes edificaciones. Además, ahora ya no puedes depender del agua. Este año, la presa Hoover en el río Colorado y la presa de las Tres Gargantas en el río Yangtze en China (la instalación hidroeléctrica más grande del mundo) han reducido su producción energética en un 20 o 30% debido a la sequía.
Las últimas noticias de que la fusión nuclear es posible nos ha hecho preguntarnos si realmente estamos ante el principio del fin de la era de los combustibles fósiles.
La fusión nuclear es muy prometedora, no contamina, pero aún llevará tiempo antes de que esté disponible comercialmente.
Una última pregunta. ¿Cómo se siente uno al dedicar su carrera a una industria tan contaminante?
Cuando escogí este trabajo, tenía amigos que decían que yo era parte del problema. Les dije: “sí, tal vez lo soy, pero también lo sois vosotros, vuestras vacaciones, casas, coches, zapatos, pelo”. Me siento muy pesimista sobre todo el asunto. No creo que haya una solución para el cambio climático. El objetivo que tenemos de limitar el aumento de temperatura a menos de 2 grados Celsius… No creo que vaya a suceder. Como individuos, tenemos algo de poder, pero es anecdótico comparado con la industria. La única forma de cambiar es a través del cambio gubernamental y la regulación de los desechos industriales. No veo un final para el petróleo en lo que nos queda de vida. Creo que el cambio climático nos alcanzará antes.
Ya conoces todos estos acuerdos, como el Protocolo de Kioto, para reducir las emisiones de carbono. Bueno, al final todos los países han aumentado sus emisiones. Los únicos países que han disminuido sus emisiones de carbono son países como Irak, Afganistán o Congo… Todos ellos son países que estaban en guerra; redujeron las emisiones porque se estaban matando entre ellos.
Sinceramente no veo solución. La realidad es que para vivir como vivimos necesitamos estas cosas. En mi empresa estamos hasta arriba de trabajo; reclutamos nuevos ingenieros todo el tiempo. Si nuestra sociedad sigue como ahora, con ese nivel de consumismo y todo ese tipo de cosas, no habrá forma de que dejemos de extraer petróleo. Tan solo puede que dejemos de quemarlo.